A veces me gustaría tener alzheimer, para olvidar que te quiero.

Lleno de éxtasis

Es un día soleado, lleno de olas amenazadoras y tiroteos. Entre bares de mala muerte, barbas, y dientes de oro ennegrecidos, las doncellas en el castillo pasan su día como cualquier otro. Sin más entretenimiento que cortar cabezas, desterrar a pobres hombres y rodearse de mil y un guardaespaldas.
Risas inhumanas por todos lados.
Cúbrete tu espalda. Están más cerca de lo que crees.
(Sale de entre los bidones, dando un salto)
-¡Bú!-dice, divertido-.
La doncella se sobresalta. Y más aún, cuando lo ve tras ella. Antes de un grito o señal de socorro, han desaparecido.
Os presento a Dyre Gerland.

2 comentarios:

  1. Aún no conozco a Dyre Gerland, pero algo me dice que me caerá bien :3
    He descubierto este blog vía Balbuceos de Oxígeno ^^ ¡Y te sigo sin duda!

    <3

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  2. Me apunto a las historias de Dyre; tiene pinta de ser encantador.
    Besitos; te sigo.

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Te lo doy entero.
El corazón, digo.